Nos llega desde Burgos la información de una probable nueva ofensa a la Fe Católica que podría llevarse a cabo en un espacio (de esos que llaman culturales, pero que sólo son criaderos de odio y mediocridad) subvencionado, para mayor escarnio de nuestro sistema político, con dinero público. Trasladamos por su importancia el contenido íntegro de la denuncia que circula por Burgos; esperando que tanto la Iglesia Católica, así como jueces y políticos, impidan esta más que posible nueva aberración e insulto a nuestra fe, pues de lo contrario los católicos nos veremos obligados a defender nuestro honor.
<<SI ERES CATÓLICO CONSECUENTE, REACCIONA CONTRA EL MAL.
Desde el próximo 29 de enero al 26 de febrero, en el local «espacio tangente» (Calle Valentín Jalón, 10) se va a exponer la obra del mediocre Abel Azcona.
Abel Azcona estuvo asistiendo durante 242 días a misa, fingiendo ir a comulgar y guardándose la hostia consagrada para luego componer esta «obra artística»:
La palabra «pederastia» formada con las 242 hostias consagradas. No olvidemos que la hostia, una vez consagrada, no es un símbolo, como la cruz o la bandera, es el cuerpo del mismísimo Cristo hecho carne. Pudo haber comprado obleas en algún sitio, en cambio, prefirió asistir a las más de dos centenares de eucaristías para que así estuvieran consagradas. Es totalmente satánico. Incomprensible tantísimo odio, tantísima maldad, tantísimas ganas de hacer daño…
Asimismo, este tipejo indeseable tiene multitud de obras en las que insulta y ataca a España y a la Religión, siempre mediante la mentira, el mal y la fealdad. En internet tenéis abundante información sobre este canalla.
Es hora de que los católicos reaccionemos. Recordemos que se puede pecar de pensamiento, palabra, obra y omisión. Quedarse mirando frente al Mal (la gravísima ofensa a Dios, el insulto al arte, a todo lo bello) en lugar de actuar es un gravísimo pecado de omisión. Los cristianos estamos llamados a ser valientes y debería ser hora de demostrarlo, tras tantísima cobardía en los últimos tiempos.
Los ataques que recibimos son constantes: desde la televisión, desde la política, desde la educación… en este caso desde el arte degenerado. Esta época niega a la Verdad, al Bien y a la Belleza. La labor del católico es defenderlo y ser guardianes de tan altos conceptos, vertebradores de toda nuestra historia.
Hay que intentar concienciar a todos los que podamos, hablar con nuestros sacerdotes y con todo aquel que esté dispuesto a echar una mano. No podemos permitir que siempre nos insulten impunemente.
Cristo nos dijo que pusiéramos la otra mejilla cuando se nos ofendía personalmente, para no pecar de soberbia. Cuando se ofende a Dios, a su Iglesia o a la Patria la respuesta ha de ser contundente. De lo contrario, estaríamos actuando con una cobardía indigna.
¡Católico, si eres consecuente con tu fe; REACCIONA CONTRA EL MAL!>>