Otros tiempos... Mismos deberes...


Termina el año 2014, año que hemos dedicado a la figura del Rey Alfonso VIII de Castilla en el octavo centenario de su fallecimiento.. Valga de homenaje final recordar la arenga que se nos ha transmitido pronunció el Noble Rey al ejército cristiano aquel amanecer del 16 de de julio de 1212, en que la Civilización Cristiana venció al maligno invasor.

Ocho siglos después, nuestra obligación sigue siendo la misma que la de nuestros heroicos antepasados.


"Españoles, hemos marchado juntos, hemos sufrido juntos. Estáis aquí los de lealtad probada. Cuando vuestros hijos y los hijos de vuestros hijos os pregunten por qué luchasteis, les contaréis que vinisteis a defenderles a ellos y a los hijos de muchos que ni siquiera conoceréis en vuestra vida. Les diréis que luchasteis por vuestra fe y la suya, pues los enemigos de la Cruz del Señor no sólo aspiran a la destrucción de las Españas, sino que también amenazan con ejercer su crueldad en otras tierras de los fieles de Cristo y oprimir el nombre de cristiano. Cuando vuestros hijos y los hijos de vuestros hijos, mirándoos con admiración y agradecidos, os pregunten quién os guiaba en la batalla diréis que no era hombre alguno sino el mismo Dios de los ejércitos y por ello acudisteis jubilosos y sin temor al combate, pues si derramamos nuestra sangre podremos contarnos entre el coro de los mártires. Cuando vuestros hijos y los hijos de vuestros hijos os pregunten por qué, abandonándolo todo, recorristeis tierras inhóspitas para luchar les diréis que os negasteis, como vuestros antepasados, a que el invasor sarraceno os impusiera sus costumbres y las creencias de la maldita secta de Mahoma. Cuando quieran saber lo que sentía esta entrañable unidad guerrera al comienzo de este día de júbilo y de gloria, la palabra que vendrá incontenible a vuestra boca será la que ahora acelera nuestros corazones: ¡libertad!"

Un griterío ensordecedor surgió de las gargantas. Se repetían las invocaciones a Santiago, los castellanos, y a San Jorge, los aragoneses.
Cuando cesó la algarabía de la arenga, el ejército se puso en marcha, bajó el talud e inició el avance hacia el enemigo. En cabeza el señor de Vizcaya, don Diego López de Haro.

Palentinos Ilustres; Don Matías Barrio y Mier (1844-1909)




  Nació el día 10 de Febrero de 1844 en Verdeña (provincia de Palencia); su familia paterna era una de las principales del país; y la materna, cuya nobleza es antiquísima, procede de Asturias. Recibió la instrucción primera en las escuelas de Verdeña , Redondo y Cervera de Pisuerga, acabando de perfeccionarse en Toledo; y en cuanto a la segunda enseñanza, cursó de 1853 a 1854 en aquel Instituto el primer año de latinidad y humanidades, el segundo y tercero en el Colegio Politécnico de Madrid, y en Junio del 56 recibió el semigrado que por entonces se exigía para pasar a filosofía. En el año 1859 recibió en el Instituto de Toledo el grado de Bachiller de Artes. En dicha capital estuvo al lado de su tío don Celestino de Mier, Deán de aquella Santa Iglesia Catedral (Primada de las Españas), y desde el año 1859 hasta el de 1865 siguió en la Universidad de Valladolid los seis años de Leyes, obteniendo en todas las asignaturas las primeras notas.
  En el mes de Junio de 1865 se licenció el señor de Barrio y Mier en Derecho Civil y Canónigo; recibió la investidura de Doctor en la Universidad de Madrid el día 10 de Noviembre del año siguiente, y la carrera de Administración la siguió en las Universidades de Valladolid y Madrid, obteniendo también en ella el doctorado.
  Siendo todavía estudiante sustituyó nuestro ilustre biografiado la cátedra de Administración (Hacienda y Derecho Político comparado) en la Universidad de Valladolid.
  En las mismas Universidades de Valladolid y de Madrid cursó también todas las asignaturas de la facultad de Filosofía y Letras hasta alcanzar el Doctorado, como en las otras dos carreras ya anteriormente citadas.
  En los cursos de los años 1866 al 68 estudió en la Universidad de Madrid los dos primeros años de Teología, con nota de sobresaliente, y no continuó esta carrera por haberse suprimido en la Universidad, a consecuencia del destronamiento de Isabel II.
  Al mismo tiempo cursó en la Escuela especial los tres primeros años de la carrera diplomática, y en Junio del de 1869 recibió el título de Archivero-Bibliotecario.
  Tenía cursadas seis carreras, habiendo sufrido dieciséis ejercicios para la obtención de grados; ganó, previa oposición, multitud de premios ordinarios o de asignatura, tres extraordinarios de grado, recibiendo cuatro grados de Bachiller, cuatro de Licenciado y tres de Doctor.
  Es imposible un ejemplo mayor de aplicación e inteligencia, pues terminó el señor Barrio Mier tantos estudios cuando sólo contaba veinticinco años de edad.
  También se dedicó al estudio de las lenguas, de las cuales poseía cinco.
  Empezó a ejercer la Abogacía desde principios de 1866, hallándose, al efecto, inscrito en los Colegios de Madrid y de Vitoria.
  El día 16 de Noviembre de aquel mismo año (cuando aún no hacía una semana que había recibido la investidura de Doctor) fue ya nombrado Profesor auxiliar de la Facultad de Derecho en la Universidad de Madrid, y en 1.º de Diciembre siguiente empezó a explicar la Cátedra de Legislación comparada, en sustitución del señor La Serna.
  Cuando estalló la Revolución de Septiembre de 1868, fue separado de la Universidad el señor de Barrio Mier, y en el curso 1868 al 69 abrió una Cátedra privada de Derecho en unión del Doctor don Vicente Oliver Bico.
  En las Cortes de don Amadeo de Saboya fue por primera vez elegido Diputado por el Distrito de Cervera de Pisuerga, al cual vino representando después frecuentemente en el Congreso, y siendo el más joven de todos los diputados del año 1871, asombró al Parlamento el portentoso trabajo de su privilegiada inteligencia.
  Al constituirse la Mesa presidencial, fue elegido tercer Secretario. Habló por primera vez en el Congreso el día 9 de Mayo, impugnando el acta de don Servando Ruíz Gómez, candidato ministerial electo por La Vecilla, provincia de León.
 Poco después ganó en reñida oposición una Cátedra de Derecho en la Universidad de Zaragoza, y cuando empezó la última guerra civil, dando una prueba más de su amor a la Causa Católico-Monárquica, abandonó la Cátedra y la carrera que tan brillante porvenir le ofrecían, y se fue al territorio dominado por las armas carlistas en el Norte, ofreciendo sus servicios a don Carlos de Borbón y de Austria-Este, cuyo augusto señor le nombró Corregidor de Vizcaya; también fue Decano de la Facultad de Derecho de la Real y Pontificia Universidad de Oñate, cuya solemne inauguración tuvo lugar en Diciembre de 1874; excusando decir nosotros que ambos cargos fueron desempeñados con entera satisfacción de todos por nuestro ilustre biografiado.
  Terminada la guerra, emigró el señor Barrio Mier a Francia, y al regresar a España hizo oposiciones a una Cátedra de la Facultad de Derecho en la Universidad de Oviedo, y hará ya unos veinte años pasó, por oposición, a la Universidad Central explicando allí la asignatura de Legislación comparada, que es una de las del grupo del doctorado de Leyes.
  En vista de sus méritos y talentos, fue nombrado Consejero de Instrucción Pública a principios del presente siglo, y Decano de la Facultad de Derecho el año 1906. En estos elevados cargos cumplió siempre de una manera delicada su misión, dando una prueba de entereza de carácter, de celo y pulcritud en el desempeño del Decanato cuando hace pocos años se opuso a que el Gobernador Civil de Madrid, Marqués de Vadillo se personase en la clase que posee para explicarla mientras estuviese revestido de carácter de autoridad gubernativa, cargo incompatible con el de profesor según la ley. Aquel incidente dio mucho que hablar; y habiendo apelado dicho Catedrático ante el Ministro, éste dio la razón al Decano, como era de justicia. Con aquel motivo recibió el señor de Barrio y Mier muchas felicitaciones, no sólo de los carlistas, sino que también de otros elementos bien distanciados de la Comunión Católico-Monárquica.
  Cuando Don Carlos de Borbón nombró Delegado suyo en España al Marqués de Cerralbo y los carlistas entraron en su periodo de actividad extraordinaria en el terreno legal, en las primeras elecciones políticas que se presentaron, que fueron las del año 1891, fue nuevamente elegido diputado a Cortes por Cervera del Río Pisuerga, D. Matías Barrio y Mier, quien desde entonces hasta su fallecimiento ejerció casi siempre la Jefatura de la Minoría Tradicionalista del Congreso. En un periodo de diecinueve años, únicamente en una legislatura dejó de representar aquel distrito en las Cortes, si bien perdió la elección por muy pocos votos, teniendo el Gobierno que apelar a inveteradas malas artes para derrotarle.
  De su gestión como Diputado y Jefe de la Minoría carlista del Congreso, bien alto hablan los admirables discursos pronunciados por el señor de Barrio Mier en distintas ocasiones, todos ellos modelos de corrección y elegancia. Sus contestaciones a los discursos de la Corona forman una brillantísima ejecutoria parlamentaria, sobresaliendo en ellos la firmeza en la doctrina y la claridad en la exposición.
  Su oratoria, lejos de ser apasionada, era sencilla, apacible y razonada; su palabra era fácil y su lógica inflexible. Capitaneando en el Congreso nuestras valientes minorías agrando la fama de su nombre con sus notabilísimos discursos en defensa no sólo de nuestros ideales, sino de innumerables asuntos de verdadero interés para el país.
  El día 7 de Diciembre de 1899 fue nombrado el señor de Barrio Mier por D. Carlos de Borbón y de Austria-Este para relevar al Marqués de Cerralbo en el cargo de Jefe Delegado de la Comunión Católico-Monárquica. Durante más de diez años llegó a ostentar la alta representación de Don Carlos; y cuán bien supo cumplir los grandes deberes de su elevado y difícil cargo, demostráronlo las muchas pruebas de afecto y consideración que constantemente recibió de parte del Egregio Desterrado de Venecia, y las grandes simpatías de que siempre disfrutó entre los elementos tradicionalistas, que le querían  y respetaban por lo que valía por lo que representaba. Cuatro elecciones de Senadores del Reino y Diputados a Cortes tuvieron lugar durante el tiempo en que el ilustre Barrio Mier figuró al frente de la política del Carlismo.
  El exceso de trabajo, sin duda, le acarreó al Sr. De Barrio Mier una anemia y postración general que le condujeron al sepulcro, falleciendo cristianamente en Madrid el día 23 de Junio del año 1909. Su cadáver fue enterrado en Verdeña, su pueblo natal; el solemnísimo acto de traslado a la estación del Norte, en Madrid, fue presidido por D. Pablo Higes (padre espiritual del finado), por D. Carlos Barrio (hijo), por D. Bartolomé Feliú (como Jefe-Delegado de la Comunión carlista), por D. Eduardo Dato (como Presidente del Congreso de los Diputados), por los ministros de la Gobernación y de Gracia y Justicia (en nombre del Gobierno de Don Alfonso), por el rector de la Universidad Central, por el Padre Fray Bonifacio Aval, Agustiniano, por el Doctor Recondo y por D. Pedro Fernández Durán.
  Del numeroso acompañamiento que tuvo tan luctuoso acto recordamos a los generales carlistas Maldonado, Villar (D. Amado y D. Mario), González-Granda, Medina, Llorens y Solana; a los marqueses de Villadarias, de Tamarit, de Figueroa, de Ibarra, de Vadillo y de Valdivia; a los condes de Garay, de Rodezno, del Pinar, de Guernica y de Casa-Sola; a los Diputados carlistas Vázquez de Mella, Díaz Aguado Salaberry y Sanz; al Diputado integrista D. Manuel Serante; a personajes liberales de tan distintas ideas como don Segismundo Moret, D. Juan de la Cierva, D. Gumersindo de Azcárate, D. Faustino Rodríguez San Pedro, D. Rafael Maria de Labra y D. Bernabé Dávila; al Director de El Correo Español D. Benigno Bolaños, al Párroco D. Francisco Hernando Bocos, y tan nutridas como distinguidas comisiones del Congreso de los Diputados, de la Universidad Central, del Colegio de Abogados de Madrid y de otras muchas e importantes corporaciones. Los estudiantes de la Facultad de Derecho, con su estandarte al frente, rodearon el coche fúnebre como dándole guardia de honor.

Actual placa de la Calle Barrio y Mier de Palencia
   El Excmo. Ayuntamiento de Palencia acordó dar el nombre de Don Matías Barrio Mier a una de las calles de dicha capital, según tuvimos el gusto de leer en El Cruzado de Castilla el día 10 de Marzo de 1912.


Biografía publicada en "Políticos del Carlismo", por el B. de Artagan en el año 1913

Feliz Navidad 2014



  Con el tradicional “Vino de Navidad” que como cada año celebramos la víspera de Noche Buena, finalizan las actividades de la ACT Fernando III el Santo por este año.

  Un año, este 2014 que ya termina, en el que hemos mantenido el listón que nos habíamos propuesto, pero siempre con la idea de que se puede y se debe de hacer mucho más. Aun así, y como breve resumen, recordamos que entre otras muchas actividades, hemos contado en Palencia con conferenciantes de lujo como Javier Barraycoa, Andrés Barón y Guillermo Rocafort; hemos estado presentes en buena parte de España defendiendo y apoyando nuestros valores y tradiciones; se han dedicado diferentes actividades en recuerdo y homenaje al Rey de Castilla Alfonso VIII con motivo del VIII Centenario de su fallecimiento; y quizá lo más importante, hemos puesto en marcha los actos que conmemoran la Proclamación de San Fernando en la localidad palentina de Autillo de Campos en 1217. Además, nuestra Asociación se ha unido a la Federación Reconquista, para de esta manera tener mayor contacto y unidad de acción con otras asociaciones afines, así como hemos ampliado las secciones de nuestro blog.

  Queda dicho, tenemos mucho por hacer, pues en esta España de taifas y miserias varias, poco o nada podemos esperar que hagan quienes por ley debieran. Por ello encaramos el año 2015 con fuerzas renovadas, con la convicción de que es justo y obligado defender nuestra cultura, fe y libertades, que cada paso importa, y que el pueblo español acabará reaccionando y exigiendo la recuperación de los símbolos y tradiciones de la Patria (garantía de nuestras libertades) si todos nos implicamos en ello.


  Desde la ACT Fernando III el Santo deseamos una Feliz y Santa Navidad, así como un próspero y reconquistador año 2015.

Algo que todos nos preguntamos ¿Cómo entender nuestra denostación permanente?



  Parece que todo lo hicimos mal, como si genéticamente estuviésemos condenados a la falta de objetivos y a la ineficiencia. Criticamos nuestra empresa civilizadora en todos los continentes sin profundizar los acontecimientos. Lo que llaman saqueo era el intercambio que hacían los indios por manufacturas, gracias al uso del caballo y la herradura que compraban con oro pasaron de tardar 40 días a un día en sembrar una hectárea. De matarse y comerse unos a otros, los pueblos precolombinos se convirtieron en una civilización católica que unificó al continente en lengua y religión, y con la consiguiente civilización compartida. ¿Si hubo abusos? Siempre los hay entre los hombres, y cualquier argentino o español, sufre el saqueo de los actuales políticos que soportamos desde hace cuarenta años. Pero de la plata extraída solo se iba a España entre un 12% y un 20%, cuando los políticos actuales saquean hasta un 50% de los ingresos de todo productor, y muchas veces a sus propios bolsillos. Además, cuando se fundó Harvard, en indias ya había unas veinte universidades. Y CUANDO ESPAÑA SE FUE HABÍA 25 UNIVERSIDADES.

  Fuimos el imperio más grande, de forma transversal a los demás, de norte a sur, lo que no es un dato menor, pues esta condición es lo que nos convertía en el árbitro geográfico del orbe, y con una moneda universal que circulaba hasta en China, lo que nos permitió crear una economía global; el mal debía destruirnos para llevar a la humanidad al actual orden mundial. La geografía, la moneda y el Evangelio, son las causas que movilizaron a nuestros enemigos.

  Tan mal no lo hicimos, pues a pesar de que nos balcanizaron en más de veinte estados, no nos libanizamos en guerras sin fin entre estados, tuvimos muchas menos guerras internas que los europeos, gracias a compartir una fe y una lengua. El periodo de Cristiandad Hispánica caminó junto a la lengua y eso nos dio conciencia continental. Y eso es herencia de la Madre Patria. Que muchos hombres y mujeres del mundo consiguieran en esta tierra labrarse una vida, también lo fue. Como dijo Eva Perón, la leyenda negra se hizo para engañarnos, y se engaña al que quiere ser engañado.

  POR SER LOS PUEBLOS HISPÁNICOS, ÁRBITROS EVANGELIZADORES DEL PLANETA FUE QUE NOS DESTRUYERON, ESA ES LA CUESTIÓN CENTRAL, NO OTRA.

  Por eso amigos de Argentina, España, Guinea, Sicilia, Filipinas y de todo el mundo ibérico, las creencias fogueadas en ochocientos años de terribles luchas por la Reconquista no pueden ser olvidadas; dejemos de criticarnos, analicemos fríamente nuestros errores pero para poder valorizar nuestros muchos aciertos, busquemos ese sol que nos hermane para fundirnos en un espíritu común y refundar nuestra grandeza.

¡¡¡Ante la ingravidez de los desvalores de hoy, nuestra historia y tradición!!!

Patricio Lons
Periodista argentino

Colaborador en Hispanoamérica de la ACT Fernando III el Santo

Exposición "Alfonso y Leonor, Reyes de Castilla"




  Como colofón a las actividades que durante este año hemos dedicado a la figura del Rey Alfonso VIII de Castilla con motivo del VIII centenario de su fallecimiento, el pasado 13 de diciembre una delegación de nuestra Asociación visitó la exposición que en el Real Monasterio Cisterciense de Las Huelgas de Burgos ha patrocinado Patrimonio Nacional.

Sepulcro de los reyes Alfonso y Leonor de Castilla
  Ya en sí mismo, el Monasterio burgalés, debido a su condición de Panteón Real de Castilla, es un tributo a la figura de Alfonso VIII que gustaba de descansar en el lugar,  dotándolo así en 1187 de grandes privilegios. Aún podemos contemplar diferentes estancias construidas en el tiempo del Rey Noble, entre las que sin duda destaca el magnífico claustro románico. En 1199 ordenó el Rey que Las Huelgas fuese el Panteón de los Reyes de Castilla, siendo Alfonso VIII y su esposa Leonor Plantagenet, fallecidos con un mes de diferencia en 1214, los primeros reyes allí sepultados. Además de estos dos formidables sepulcros, también se encuentran allí los del Rey Enrique I, la Reina Berenguela (humildísimo), y el de numerosos infantes e infantas, entre el que destaca el de Don Fernando de la Cerda, que afortunadamente se libró del saqueo y destrozo con que la chusma revolucionario-napoleónica trataba nuestros símbolos regios.

Corona de los Camafeos
  La muestra conmemorativa que se encuentra en el antiguo locutorio, y se organiza en cuatro secciones: en primer lugar se exponen piezas relativas a la imagen y el poder real, y después se exploran, por este orden, la liturgia monacal, las artes suntuarias y las ceremonias regias. De todo ello destacamos la llamada “Corona de los camafeos” que sabemos fue utilizada por los Reyes de Castilla; Sancho III, Alfonso VIII, Enrique I, Fernando III y Alfonso X; la arqueta de los apóstoles; el antifonario de Las Huelgas (uno de los más antiguos y expuesto por primera vez); numerosos bordados realizados por las reinas Doña Leonor y Doña Berenguela; además de ropas utilizadas por el obispo Jiménez de Rada, Enrique I y el propio Alfonso VIII.

Almohada bordada por la Reina Doña Berenguela
  Sin duda una visita siempre recomendable para todo español la del Monasterio burgalés de Las Huelgas, que recordamos, fue construido casi en su totalidad por el Rey Fernando III el Santo, y que guarda en cada rincón, como ningún otro lugar en España, el sello personal del Santo Rey Don Fernando.

                            Alfonso y Leonor, Reyes de Castilla, VIII centenario

Sembremos hoy… para así Reconquistar mañana



Hace unos meses, desde la Federación de Asociaciones Reconquista, nos pidieron un artículo en el que definiésemos el porque se fundó nuestra Asociación, y cuales son sus objetivos. Recuperamos este artículo en que se explican dichas razones.

http://federacionreconquista.blogspot.com.es/2014/05/sembremos-hoy-para-asi-reconquistar.html

Añadiríamos a las explicaciones que se dan en dicho artículo, nuestra permanente preocupación y sentimiento de desamparo que sentimos muchos españoles ante la permanente pérdida de libertades, valores, principios y justos deberes a los que se viene viendo abocada nuestra Patria desde hace ya demasiado tiempo. Situación, que si no somos capaces de cambiar, nos llevará irremisiblemente hacia un futuro miserable, sin esperanza alguna. Por ello entendemos que, como ya ocurrió en otros momentos de nuestra historia, somos el pueblo quienes debemos implicarnos y sacrificarnos en la defensa de nuestras tradiciones y libertades, pues ya poco o nada podemos esperar de unos gobiernos cómplices y vasallos de la modernidad dominante.. Sirva por tanto el ejemplo de quienes nos antecedieron con honor y valor, como ejemplo al que seguir fielmente, redoblando esfuerzos, en este momento en que nuestra civilización se adentra en las tinieblas..

Conferencia sobre San Fernando en Santa Elena (Jaén)




  El pasado seis de diciembre, el Presidente de la ACT Fernando III el Santo, impartió una conferencia en la localidad jienense de Santa Elena sobre la vida del Rey Fernando III el Santo.

  En el ánimo de nuestra Asociación está presenta desde su fundación, divulgar y defender el legado del Rey san Fernando como símbolo de los grandes valores hispánicos. Acto que cobra especial importancia en estos tiempos en que la falta de valores, así como el individualismo parecen imponerse en una sociedad española que parece galopar convencida hacia el abismo.


  Durante la conferencia, Don Luis Carlón Sjovall recordó como el rey Don Fernando nació en una España dividida en diferentes reinos, y no exenta de frecuentes disputas entre ellos. Y como la Castilla que heredó a la muerte de su tío, el rey Enrique I, era un polvorín de guerras internas entre nobles y concejos, a pesar del buen legado dejado pocos años antes por el rey Alfonso VIII. En contraposición, se recordó que a partir del glorioso reinado de San Fernando, desaparecieron todo tipo de revueltas en Castilla, así como se alcanzaron acuerdos de paz y cooperación con el resto de reinos cristianos. De esta manera, el Reino de Castilla pudo dedicar todos sus esfuerzos, a los que se uniría el Reino de León en 1230 tras ser también heredado por Don Fernando, a la misión fundamental de reconquistar España para la fe de Cristo. Así, se terminó la conferencia recordando que:

  (A pesar de su prematura muerte, el reinado de San Fernando nos deja un legado impresionante. Reconquistó los Reinos de Córdoba, Murcia, Jaén y Sevilla. Dejó vasalla de Castilla a Granada. cambió el latín por el castellano como lengua oficial del Reino. Revitalizó las artes y las ciencias (su hijo siempre reconoció que el Sabio no era él, sino que todo se lo debía a su padre), en arquitectura por ejemplo comienza bajo su gobierno la construcción de las catedrales de Burgos, Toledo, Sevilla y jaén, así como numerosísimas iglesias de estilo gótico. Ordenó y modernizó los fueros de las ciudades. Y sobre todo, con su aura de justicia, valor y santidad unió España como posiblemente nunca lo estuvo antes. Además de mantener el orden en Castilla, durante su reinado la paz la concordia fueron los rasgo predominantes en su relación con sus vecinos de Aragón, Navarra, Portugal o Francia. Y es que San Fernando NUNCA perdió una batalla, quizá por eso fue proclamado por el Papa Inocencio IV "Campeón invicto de Jesucristo")


  Para la ACT Fernando III el Santo, ha sido un honor poder rememorar la figura de San Fernando, invitados por la Orden de Caballeros de la Veracruz del Rey Fernando III,  en un lugar tan emblemático como es la Casa de las Órdenes de Santa Elena, sita junto al lugar donde el Rey Alfonso VIII mandó edificar una capilla dedicada a Santa Elena, madre del Emperador Constantino, en devoto recuerdo a la señal con que el cielo nuevamente, como ya ocurrió en Puente Milvio en 312,  iluminó a la hueste cristiana aquel 16 de julio de 1212, día en que la España cruzada venció unida al invasor sarraceno en la Batalla de Navas de Tolosa.