La A.C.T. Fernando III el Santo de Palencia solicita que se cambie el Día de Castilla y León al 30 de mayo.


Con motivo de la celebración, el próximo 23 de abril, de la fiesta de la comunidad autónoma, la Asociación vuelve a recuperar una de sus reivindicaciones tradicionales, fundamentada en la definitiva unión de los reinos de Castilla y de León bajo el reinado de Fernando III. La Asociación piensa que ese acontecimiento histórico ha tenido mucha más importancia que la derrota de los comuneros a la hora de forjar la personalidad castellano-leonesa.

19.04.12. La Asociación respeta a todos aquellos que acuden cada año a la campa de Villalar, pero no está de acuerdo en la significación política que siempre se le ha querido dar al evento. Si lo que se pretende es celebrar la festividad de todos los castellano-leoneses, es mucho mejor utilizar un día que representa perfectamente el espíritu de unión de las antiguas coronas, tal como queda reflejado en los blasones de la región aprobados en el Estatuto de Autonomía, que coinciden casi exactamente con el escudo de armas de Fernando III.
Los integrantes de la Asociación piensan que la mejor forma de conseguir que la festividad de Castilla y León sea una celebración ajena a sesgadas reivindicaciones políticas es trasladando la fiesta al 30 de mayo, día en que se conmemora la muerte del rey que unió definitivamente los reinos de Castilla y de León.
No debe olvidarse que el rey Fernando III el Santo es uno de los personajes más insignes que ha dado Castilla y León. Con una visión política excepcional, fue capaz de acabar con las constantes guerras civiles, volcando sus esfuerzos hacia la reconquista. Además, con su traducción del Fuero Juzgo, fue el primer monarca que implantó el uso civil de la lengua castellana. Por no hablar de su ingente labor cultural, destacando el impulso que proporcionó a la construcción de catedrales como la de León o la de Burgos. 

Batalla de "Las Navas de Tolosa 1212-2012"

La A.C.T. Fernando III el Santo de Palencia se ha asociado a la Asociación Memoria Navas de Tolosa. Nuestra intención es colaborar en todo lo que sea posible en la difusión y conmemoración de tan magno centenario como es el VIII Centenario de la Batalla de Las Navas de Tolosa.




Visita a la Diputación de Palencia

La A.C.T. Fernando III el Santo visitó la Diputación de Palencia.


Desde aquí agradecemos la atención que recibimos durante la visita en la que pudimos ver la el palacio construido por el arquitecto Jerónimo Arroyo en estilo neoclásico y neo-renacentista, e inaugurado en el año 1916. Durante la visita pudimos disfrutar de los cuadros y vidrieras realizados por artistas palentinos en la primera mitad del siglo XX, que recuerdan momentos de la Historia de la provincia de Palencia.

Cristalera de la escalera principal

Cuadro representativo de la conquista de la vieja Pallantia por el ejército romano.

Vidriera que representa la fundación de la Universidad de Palencia.

La ACT Fernando III el Santo siempre con la Vida


Como en años anteriores nuestra Asociación se suma a la organización de los actos 25-M SÍ A LA VIDA, así que animamos a todos los socios y simpatizantes a participar con vuestras familias y amigos.

Será en la Plaza Mayor de Palencia el Domingo 25 de Marzo desde las 12:00 horas y habrá juegos infantiles, concurso de pintura para niños, música, reparto de regalos…..

El acto lo presentará Carolina Casero de COPE Palencia, y varias asociaciones pro-vida palentinas leerán su testimonio, y se finalizará el acto con la tradicional lectura del manifiesto.

Espada Lobera "La Socia Belli"


Nuestra Señora en el arzón o Virgen de las Batallas de San Fernando (Catedral de Sevilla)
  Bien a los reyes está…amar a Santa María…pues en sus grandes desvelos…les acude luz y guía…. Estas palabras de Alfonso X el sabio, nos recuerdan la gran devoción que desde siempre se ha manifestado a Nuestra Señora, la Madre de Dios, por parte del pueblo español, y muy especialmente por parte de sus mejores reyes.
  
  Y es que la Madre del Cielo ha estado presente en nuestros corazones desde siempre. En cada momento histórico crucial de nuestra historia, nuestra Santa Madre ha aparecido en nuestra tierra ofreciéndonos su amor. Si nos remontamos a los primeros tiempos del cristianismo, nos encontramos con su primera bendición a España, apariciéndose al apóstol Santiago el Mayor, en el famoso Pilar de Zaragoza. Años después, en un momento especialmente grave, volvió a aparecerse de forma crucial en la Cueva de Covadonga, inspirando a Don Pelayo y sus tropas en la decisiva batalla frente a los infieles. Y como no, ante los graves momentos que vivimos hoy en día, Nuestra Señora volvió a asistirnos con su aparición en Fátima ante los tres pastorcillos.

   El rey San Fernando, como todos sabemos, amaba profundamente a la Madre de Dios, y sin ese amor, no se puede entender la grandiosidad de su reinado. El rey, siempre recto, siempre justo y siempre bondadoso, se acompañó a lo largo de su reinado de la “Espada Lobera” y de Nuestra Señora en el arzón o Virgen de las Batallas.  Imagen parece ser que regalada por su primo el rey San Luís de Francia. La espada y la imagen de Nuestra Señora constituían su altar personal durante sus duras campañas frente al infiel, inspirándole fuerza y amor en su afán de justicia cristiana.

  La Virgen de las Batallas que portaba San Fernando, actualmente se encuentra en la Sacristía Mayor de la Catedral de Sevilla, desde que Alfonso X el Sabio la entregó personalmente para su culto, junto a las fabulosas Tablas Alfonsíes.

   Algunas otras imágenes de la Virgen de las Batallas son también veneradas en otros lugares de España. Quizá la más relevante, sea la conocida como Virgen de Arlanza que aunque la tradición nos dice que acompañó al Conde Fernán González, no es posible, pues está datada a principios del S. XIII. Esta imagen, de unos treinta centímetros de altura y repujada en cobre, fue realizada en Limoges, probablemente en el mismo taller que la que portaba San Fernando. La Virgen de Arlanza fue recuperada en el año 1997, pues había sido sustraída del propio monasterio de Arlanza tras la desamortización y pasó más de un siglo en manos privadas en el extranjero.

  Otras Imágenes de la Virgen de las Batallas, las tenemos por ejemplo en la localidad palentina de Autillo de Campos, lugar donde fue coronado rey de Castilla San Fernando, y que probablemente tenga relación con la figura del propio rey santo, ya que también es del S. XIII. En Guadalajara también se venera una imagen reconstruida de la Virgen de las Batallas de los años cuarenta, pues la original donada por el rey Alfonso VI en el S. XI fue quemada junto con otras imágenes por la furia roja durante la guerra civil.

  Como conclusión, decir que la imagen prototípica de la Virgen de las Batallas, responde al modelo iconógrafico de Virgen como sedes sapientiae, es decir, trono o sede de sabiduría. Se la representa sentada en un trono, en posición mayestática, sosteniendo al Niño, que es la figura central y principal que encierra en si la Sabiduría Sagrada y por ello muestra una actitud de bendecir, lleva el Libro de las Revelaciones y en su corona aparece el símbolo de la Cruz.

6/03/2012
Luis Carlón Sjovall
A.C.T. Fernando III el Santo

Espada Lobera "Palencia en el 2012"



  Los aniversarios siempre tienen dos caras, por un lado nos recuerdan lo que fuimos e hicimos, pero por el contrario, también nos recuerdan lo que ya no somos y lo que hemos dejado de hacer. Quizá por esta segunda razón, en esta época que nos ha tocado vivir, de cierta dejadez, cansancio y poca perspectiva de futuro, preferimos pasar de puntillas por nuestras propias onomásticas individuales, y si cabe, aún más por las que recuerdan los hechos (especialmente los gloriosos) que acometieron nuestros antepasados.

  Este año 2012, conmemoramos los octavos centenarios de la Batalla de “Las Navas de Tolosa” y de la fundación de la Universidad de Palencia (primera de España). Dos acontecimientos fundamentales y que marcaron el futuro de España, y si me apuran el del occidente cristiano. Más, teniendo en cuenta lo comentado anteriormente, nos tememos que nuestros políticos e instituciones volverán a pasar de puntillas y ladeados para no molestar sobre dichas conmemoraciones. Eso sí, supongo que con el segundo centenario de “la Pepa” (del que no discuto su importancia histórica), podemos llegar a tener un serio problema de sobredosis propagandística.

  Pero no seamos negativos, los aniversarios están ahí, y merecen ser celebrados convenientemente por quienes recuerdan con orgullo a sus héroes. Nosotros desde la A.C.T. Fernando III el Santo tenemos motivos para ello, tanto en nuestra condición de españoles como de palentinos. Me explico, en la gloriosa Batalla de “Las Navas”, en la que el rey de Castilla Alfonso VIII derrotó totalmente a los ejércitos almohades, nuestra tierra estuvo representada por un gran contingente de milicias ciudadanas al mando del obispo Tello Téllez, además de por las mesnadas nobiliarias de los Girón y los Téllez. Fue tal la importancia de la participación palentina en tan “magno” momento, que el propio monarca condecoró a la ciudad con la cruz que todavía hoy porta orgulloso el escudo palentino. De la Universidad palentina, decir basicamente, que fue la primera de España, que estuvo en Palencia, y que sus artífices fueron el rey Alfonso VIII y el obispo Don Tello Téllez de Meneses. Posteriormente, y tras la unión de Castilla con León, fue perdiendo importancia hasta desaparecer en beneficio de los estudios salmantinos.

  Está suficientemente dicho, que un pueblo que aspire a ser libre debe ser devorador de conocimientos, y su propia Historia debe de ser el primero de ellos, especialmente para que seamos conscientes de cual debe de ser nuestro papel durante nuestra temporal estancia en este mundo. El conocimiento fomenta la unión, el esfuerzo y la sana ambición en pos de un mundo mejor. Por ello, es tan importante que estos gloriosos recuerdos de nuestra Historia no pasen desapercibidos, y especialmente no pasen desapercibidos entre los más jóvenes. Si no es así, y seguimos por este camino de pervertir e ignorar nuestra propia Historia, nuestra civilización estará condenada a la desaparición. Nos lo enseña la Historia….

20/01/2012
Luis Carlón Sjovall
A.C.T. Fernando III el Santo

Espada Lobera "El Camino de Santiago Primitivo"


Quien firma el artículo junto a la estatua de Alfonso II el Casto de Santiago de Compostela
 Corría el año 813, cuando la noticia del descubrimiento del sepulcro del Apóstol Santiago el Mayor conmocionó a todo el orbe cristiano. Inmediatamente, el rey Alfonso II el casto, se encaminó hacía Iria Flavia (lugar del descubrimiento) desde Oviedo, y mandó construir la primera capilla dedicada al Apóstol. Inmediatamente, y en parte gracias a la difusión que dio el emperador Carlomagno al descubrimiento, un torrente de peregrinos procedentes de todas las partes de Europa se encaminaron en peregrinación hacia el Finisterre de la Cristiandad.

   Con la intención de seguir los pasos del rey asturiano, y lógicamente de realizar de nuevo el Camino de Santiago en su vertiente espiritual, recorrí durante las últimas dos semanas esta magnífica ruta conocida como “Camino de Santiago Primitivo”. Y es que el nombre de “Primitivo”, además de deberse a ser el primer Camino que llevó a la tumba del Apóstol en peregrinación, también podríamos adjudicarle el término desde el punto de vista de la austeridad con la que hoy en día, en pleno siglo XXI, se sigue realizando este Camino, pues el peregrino no cuenta con la comodidad que te dan los establecimientos hosteleros que nos encontramos en otros Caminos.

  Durante los trece días de solitaria y tranquila caminata (sólo me encontré con un peregrino canadiense), y es que exceptuando las breves estancias en Oviedo, Lugo y Santiago, el Camino transcurre por los valles y montañas astur-gallegos entre pequeños caserios de gentes hospitalarias y espesos bosques que te hacen ver que estas realmente siguiendo los mismos pasos que dio el rey Alfonso durante su peregrinación en la “Alta Edad Media”.

   En este Camino, no son pocos los lugares de interés histórico que se disfrutan, y es que ya desde la salida en la propia Catedral de San Salvador de Oviedo, con su estampa y magnífico tesoro catedralicio, te das cuenta que te vas a sumergir en los orígenes espirituales y culturales de la España nacida de la “Reconquista”.

   La ruta atraviesa multitud de pequeñas ermitas, sendas recónditas entre viejos castaños y nogales, viejos hospitales de peregrinos encaramados en lo alto de las montañas y muchísimos lugares de interés histórico. Como Salas, donde se puede contemplar el Palacio de los Valdés Salas y la colegiata de Santa María la Mayor, donde está el mausoleo de Don Fernando Valdés Salas (Inquisidor General y fundador de la Universidad de Oviedo durante el reinado de Isabel la Católica). Cornellana, donde pude pasar la noche en el monasterio de San Salvador construido en 1024 por el rey Bermudo II de León. Tineo y Baleira, donde Alfonso II el casto derrotó por dos veces a las huestes sarracenas de Abdelrramán II. Lugo con su magnífica muralla que rodea un precioso centro urbano coronado por su Catedral. Y finalmente Santiago de Compostela, con su monumental casco antiguo e inigualable Catedral.

  Sin duda un Camino de cultura y espiritualidad al alcance de la mano, muy recomendable en estos tiempos que corren en que ni la cultura ni la espiritualidad son lugares comunes para la mayoría de los españoles.

17/11/2011
Luis Carlón Sjovall
A.C.T. Fernando III el Santo

Espada Lobera "Un poco de Memoria Histórica"



  Para el español contemporáneo, hablar del siglo VIII, es hacerlo del drama de la batalla de Guadalete, y de las desastrosas consecuencias que la derrota de las huestes del rey Don Rodrigo acarrearon a la España goda. Pero si nos sumergimos un poco más allá en esta época, nos daremos cuenta, que es precisamente en este tiempo, cuando España forja las bases de su gloriosa naturaleza.

  Desde mi punto de vista, nunca hubo mejores españoles que los de aquel tiempo, desde Don Pelayo y la batalla de Covadonga, hasta los tiempos del rey Alfonso III el magno con la conquista del valle del Duero y la refundación de León, los españoles de aquella época sobrevivieron, crecieron y vencieron porque siempre tuvieron claro que Cristo es nuestra razón de ser como nación.

  En aquella época de héroes y mártires, “absolutamente olvidados por ende de los miserables gobiernos que sufre España desde hace décadas, no vaya a ser que a algún joven le de por copiarles”, sobresale la figura del rey Alfonso II el casto. No pretendo relatar la vida del rey Alfonso, que sin dudad daría para bastante más que un simple artículo, es su visión de España y las bases que implantó las que interesan en este caso.

  Alfonso II el casto, se hace con el cetro de Asturias el 14 de septiembre de 791, tras la renuncia del rey Bermudo II. Hasta ese momento, el reino asturiano mantenía una política de supervivencia, encajonado como estaba entre el fortísimo califato cordobés por el sur y el inmenso imperio de Carlomagno por el norte. Tras cincuenta y dos años de gobierno, Alfonso dejó un reino temido por los musulmanes y aliado como igual al Imperio Carolingio. Esta política se basó en dos pilares fundamentales, la idea de Reconquista y la autonomía religiosa.

  Idea de Reconquista: Alfonso tenía claro que el reino de Asturias era la continuación del reino cristiano-godo perdido en Guadalete, por lo que reinstauró las normas y leyes perdidas como base fundamental para recuperar la tierra usurpada por la media luna. Como hemos dicho, el reino de Asturias apenas era un pequeño grupo de cristianos refugiados entre las montañas, que mantenía su fe a duras penas frente a las continuas razias musulmanas. Aquel reino comprendía parte de las actuales regiones de Asturias, Cantabria y Galicia. Tras Alfonso, el reino se extendería desde Guipúzcoa hasta el rio Miño, y lo más importante, es en este tiempo cuando los pobladores del reino empiezan a reconquistar el sur de la cordillera cantábrica y los valles del norte de Burgos y La Rioja.

  Autonomía religiosa: Hasta el reinado de Alfonso II el casto, Toledo seguía siendo la capital religiosa de España, con lo cual la Iglesia de Asturias dependía directamente de su diócesis; pero lógicamente, teniendo en cuenta que se encontraba dentro de territorio sarraceno, la independencia de la diócesis toledana era limitada. Por ello, el rey fundó Oviedo a imagen y semejanza de la antigua Toledo goda, y la dotó de todo lo necesario para convertirse en la nueva diócesis primada de España. Poco queda ya de las edificaciones Alfonsinas, pero si que nos queda adosada a la Catedral la “Cámara Santa”, único resto de la Iglesia de San Salvador, y que contiene desde entonces “la Cruz de los Angeles” donada por el rey casto, “la cruz de la Victoria” con la que Don Pelayo venció en Covadonga y primer símbolo de España, y el “Arca Santa”, reliquia que contenía entre otros símbolos de culto siete espinas de la corona de Cristo, una sandalia de San Pedro y especialmente el Santo Sudario de Nuestro Señor. El arca salió de Jerusalén en el 612 tras la toma de la Ciudad Santa por los sarracenos, y tras pasar por Alejandría, Sevilla y Toledo acabó en Oviedo en tiempos del rey Alfonso.

  Sin duda, el legado de Alfonso II el casto es extraordinario, y esto a veces lo saben más los enemigos de España que sus buenos hijos. La “Cámara Santa” de la Catedral de Oviedo sufrió un gravísimo atentado con explosivos durante la Revolución de Asturias de 1934 por miembros del partido socialista (casi todas las joyas y reliquias que guardaba quedaron seriamente dañadas, cuando no desaparecidas para siempre).

  La idea de España, como bien nos enseñaron nuestros antepasados tiene una raíz inequívoca, defendamos esa idea, porque los que atentaron contra el legado de Alfonso II el casto, mientras se llenan la boca hablando de memoria histórica, no cabe duda que envalentonados por nuestra apatía y su odio continuaran atacando la idea y los símbolos de “La Verdadera Memoria Histórica Española”.

5/10/2011
Luis Carlón Sjovall
A.C.T. Fernando III el Santo

Espada Lobera "A propósito de las JMJ 2011"



  Cuando S.S. Juan Pablo II convocó las primeras JMJ en Buenos Aires, en el ya lejano año 1986, Europa y el mundo occidental se sonreían con cierto desprecio observando a esos jóvenes “beatillos” que seguían al Papa incondicionalmente. Y es que aquel tiempo era más propenso a mirarse el ombligo y darse golpes en el pecho vanagloriándose de las virtudes de las sociedades liberal-capitalistas, que a mirar hacia el interior de uno mismo. Y si hacia falta un enemigo, pues nos contaban las maldades que cometían los de el otro lado del telón de acero, y arreglado.

 Mucho ha cambiado el mundo desde entonces, los estados socialistas que ocupaban buena parte del mundo occidental desaparecieron víctimas de su propia naturaleza ignominiosa; las democracias liberales por su parte, han ido demostrado con el tiempo que no eran ni de lejos ese “Valhala” prometido al que teóricamente había llegado el hombre occidental después de una feroz lucha –especialmente propagandística- frente a los “presuntos oscurantismos” del “Antiguo Régimen” cristiano católico que durante siglos gobernó los designios de occidente; la Iglesia por su parte, con algún que otro tumbo, seguía en su sitio, como no puede ser de otra manera.

  Ahora, en los albores del siglo XXI contemplamos como todo lo que nos vendieron los descendientes de la inefable “Revolución francesa” como cierto y absoluto, se derrumba sin solución aparente, y el remedio que nos ofrecen para salir de este desastre es una huida hacia delante basada en más codicia, más ignorancia, más mentiras y por supuesto más odio. Ahí están los “intelectuales” de siempre esparciendo basura desde sus púlpitos mediáticos, ahí está esa caterva que se hacen llamar indignados, y que en el fondo solo supuran odio a todo lo que no sea como ellos, también los políticos son culpables con su doble moral permanente en la que algunos llegan a calificarse como católicos y pro-abortistas a la vez por poner un simple ejemplo. Toda esta gente habla permanentemente de libertad y solidaridad, cuando la realidad es que desparraman por cada poro de su cuerpo todo lo contrario.

  Ante este panorama, la figura de S.S. Benedicto XVI, y la de todos los peregrinos que estos días abarrotan las calles de Madrid, se erigen como el ejemplo eterno de Verdad, de moral, de educación, de coherencia, de dignidad, de virtud y de Fe. No hay más que escuchar y observar….

  Gracias Santidad, por recordarnos permanentemente que tenemos el derecho y la obligación de ser hombres y mujeres libres, gracias por ser el buen pastor, gracias Santo Padre por su entrega sin límites en favor de la dignidad del hombre.

                  "Benedictus qui venit in nomine Domini"

19/08/2011
Luis Carlón Sjovall
A.C.T. Fernando III el Santo

Entrevista al presidente de la A.C.T. Fernando III el Santo



El presidente de la A.C.T. Fernando III el Santo fue entrevistado el pasado miércoles 8 de junio en el Canal 8 Castilla y León televisión. Durante la entrevista, se comenta la actualidad de la Asociación y alguno de los futuros proyectos.